Esta mañana, el Papa Francisco pronunció su primer discurso en Lisboa en el marco de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) Lisboa 2023, en el Centro Cultural de Belém (CCB).

En este encuentro con el Presidente de la República, las Autoridades, la sociedad civil y el Cuerpo Diplomático, habló sobre los desafíos actuales como la migración, la crisis climática, la guerra y el papel de los jóvenes. También se mencionó a Amália Rodrigues, Luís de Camões, Sophia de Mello Bryener y Fernando Pessoa.

Lisboa es la "capital del mundo" en estos días y el lugar cuya frontera con el océano marca el tono del inicio del discurso, porque, como dice el Santo Padre, "recuerda la importancia del conjunto, de concebir las fronteras no como límites que separan, sino como zonas de contacto".

A partir de esta idea, he aquí diez ideas del mensaje que el Papa compartió con nosotros:

1. 

Me siento contento de estar en Lisboa, ciudad de encuentro que abraza diferentes pueblos y culturas, y que en estos días se vuelve todavía más universal; se transforma, de alguna manera, en la capital del mundo.

2.

El océano no une solamente pueblos y países, sino también tierras y continentes; por eso Lisboa, ciudad del océano, nos recuerda la importancia del conjunto, el valor de las fronteras como zonas de contacto, no como barreras que separan.

3.

Quisiera agradecer el gran trabajo y el generoso compromiso de Portugal para acoger un evento tan complejo de gestionar, pero fecundo en esperanza. Como se dice por estos lares: «Junto a la juventud, uno no envejece».

4.

El océano nos recuerda que la vida humana está llamada a armonizarse con un entorno más grande que nosotros, que hay que cuidar con esmero, pensando en las generaciones másjóvenes.

5.

¡Qué hermoso es redescubrirnos como hermanos y hermanas, trabajar por el bien común, dejando atrás contrastes y diferencias de puntos de vista! También aquí tenemos a los jóvenes que, con su grito de paz y su deseo de vivir, nos llevan a derribar las rígidas barreras de pertenencia erigidas en nombre de opiniones y creencias diferentes.

6.

Quisiera agradecer y animar, junto a las muchas personas de la sociedad portuguesa que se preocupan por los demás, a la Iglesia local, que hace tanto bien, sin protagonismos.

Este es el primero de los cinco días del Papa Francisco en territorio portugués. En Lisboa, durante estos días, "Un océano de jóvenes está inundando esta acogedora ciudad", dijo.